Haaland es la otra posibilidad que el Real Madrid tiene abierta si finalmente Al Khelaifi no accede a vender a Mbappé este verano. El problema es que, a sus 20 años, el delantero noruego es incluso más caro que el propio Mbappé. Lo es porque inicialmente el Borussia Dortmund se niega a vender a su estrella. Y porque no es hasta el verano de 2022 cuando hay un pacto verbal entre el CEO del propio Borussia, Hans Joaquim Watzke, y el representante del jugador, Mino Raiola, para facilitar la salida del futbolista a un precio razonable.

Tampoco es descartable, por tanto, que tanto Mbappé como Haaland se le pongan finalmente a tiro al Real Madrid en el verano de 2022 y que ninguno de los dos pueda venir para la próxima temporada. De cualquier manera, en el caso del noruego, como sucede con Mbappé, la gran ventaja del Real Madrid es que el futbolista está totalmente decidido a vestir la camiseta blanca. E incluso a esperar si fuera necesario para cumplir su sueño.

Para poder traer a Haaland al Bernabéu ha sido decisiva la clasificación del Borussia in extremis para jugar la próxima edición de la Champions. Si no, según ha podido saber este periódico, Haaland sí que habría forzado su salida, temeroso de haber perdido foco la próxima temporada y haber negociado después el que debe ser el primer gran contrato de su vida a la baja… Eso no sucederá.

Por otro lado, la excelente relación entre el CEO del Borussia, Hans Joaquim Watzke, y Florentino Pérez, deja al Madrid en la pole ante una eventual puja con otros grandes por el fichaje del noruego. De este modo, Watzke dará prioridad absoluta al Madrid por Haaland. Ya lo hizo con Aubameyang, pero al Madrid no le interesó su contratación y se fue al Arsenal. Esta buena relación queda patente en las cesiones de jugadores del Madrid al equipo de la cuenca del Ruhr, como sucedió primero con Achraf y luego con Reinier.